
En la orilla del mar con una vista panorámica de una bahía y, a un lado de la catedral, en Palma de Mallorca se encuentra el Palacio de la Almudaina.


Se trata de un edificio de origen árabe y romano, que finalmente, el rey Jaume II y su mujer Esclarmunda de Foix en los avances del s. IV lo ocuparon.


La planta baja tiene un marcado estilo medieval.






Se puede disfrutar de una terraza desde la que se observa la bahía, que es algo estratégico por supuesto.



La planta alta fue adaptada y modernizada y es la que ocupan los Reyes de España en sus estancias de verano en Palma de Mallorca.






No recuerdo si es el más antiguo que he visitado y es más bien pequeño pero, eso sí, es elegante.





Sin embargo, en su estilo simple se observa la elegancia de su época y con un poco de imaginación, los salones se pueden llenar en nuestra mente con personas, con la chimeneas encendidas, las lámparas con los mechones encendidos y la gente quizá emocionada con algún acontecimiento.
La entrada cuesta 7 Euros que ahorré con mi credencial de profesora.
